¿Puedo recurrir a una subrogante si soy VIH positivo?

Digámoslo de una vez: Sí, puedes formar tu familia mediante gestación subrogada aunque seas VIH positivo. Esta es sólo una de las muchas maneras en que el mundo es diferente hoy en día para las personas que viven con el virus del VIH, cuando el diagnóstico era, para la mayoría, una sentencia de muerte. Hoy en día, la mayoría de las personas seropositivas (al menos las que tienen acceso a fármacos que salvan vidas) pueden llevar una vida larga, feliz y productiva, como cualquier otra persona, y pueden ser padres biológicos como cualquier otra persona. Se trata de avances realmente notables, sobre todo para quienes vivieron el apogeo de la epidemia y aún están aquí para contar sus historias.

Existen varias precauciones -incluido el “lavado de esperma” y las terapias antivirales- que impiden que las personas seropositivas transmitan el virus al bebé o a la madre de alquiler durante el proceso de gestación subrogada. Repasemos a continuación las formas en que las personas seropositivas pueden convertirse en padres biológicos:

Tratamientos antirretrovirales: Indetectable = Intransmisible

Gracias a los tratamientos antirretrovíricos, muchas personas seropositivas tienen ahora lo que se denomina un nivel “indetectable” del virus en su organismo. Esto significa que el virus se ha reducido a una cantidad tan insignificante en el organismo que no puede detectarse mediante los análisis de sangre habituales ni transmitirse a otras personas. Las investigaciones han demostrado que las personas seropositivas con una carga viral indetectable no pueden transmitir el virus a sus parejas ni a los hijos concebidos a través de relaciones sexuales. Esta verdad se representa a menudo en Internet y en otros lugares con la abreviatura U=U, que significa “Indetectable” igual a “Intransmisible”. A pesar de este gran avance (que también contribuye a garantizar que quienes viven con el VIH puedan llevar una vida larga, normal y sana), las personas seropositivas suelen tomar precauciones adicionales para asegurarse de que el virus no se transmite a sus parejas o a su bebé.

Lavado de esperma

Una persona VIH-positiva que espera contribuir con esperma como parte de un viaje de subrogación puede someter su muestra a un procedimiento conocido como “lavado de esperma”, que elimina el riesgo de transmisión a la portadora gestacional o al bebé.

Luego de extraer el semen del integrante seropositivo de la pareja, la muestra se somete a un proceso, conocido como centrifugación, para separar los espermatozoides del líquido seminal. Dado que el virus del VIH está presente en el líquido seminal, y no en el esperma, se elimina el riesgo de transmisión del VIH a la portadora gestacional en un acuerdo de subrogación o al niño resultante. Un estudio en el que participaron 914 parejas que se sometieron a este procedimiento no detectó ningún caso de infección por VIH entre las mujeres, ni entre los niños concebidos, tras el procedimiento de lavado de esperma.