Crisis emocional durante la FIV, ¿qué hacer cuando la calidad del esperma es baja?

Descubrir que tiene problemas de fertilidad o que la calidad de su esperma no es óptima puede ser una experiencia desafiante y emocionalmente difícil. Es importante recordar que tener problemas de fertilidad no define su autoestima ni su masculinidad, y es un problema común al que se enfrentan muchas personas y parejas. Someterse a tratamientos de fertilidad como la fecundación in vitro (FIV) puede ser una montaña rusa emocional y estresante para muchas personas y parejas. Es normal sentirse abrumado, ansioso, triste o frustrado en distintos momentos del proceso de FIV. He aquí algunas estrategias que le ayudarán a sobrellevar las crisis emocionales durante este proceso:

  • Busque apoyo: Hable con su equipo médico, coordinadores, pareja, amigos o un terapeuta sobre sus sentimientos. Puede ser útil compartir sus emociones y preocupaciones con alguien de confianza.
  • Infórmese: Infórmese sobre la infertilidad masculina y las posibles opciones de tratamiento. Comprender el problema puede ayudarle a sentirse más capacitado y a controlar la situación.
  • Cuídese: Cuídese física y emocionalmente descansando lo suficiente, alimentándose bien, haciendo ejercicio y participando en actividades que le gusten.
  • Únase a un grupo de apoyo: Considere la posibilidad de unirse a un grupo de apoyo para personas o parejas que se enfrentan a problemas de fertilidad. Conectar con otras personas que están pasando por una experiencia similar puede proporcionar consuelo y comprensión.
  • Mantenga una actitud positiva: Recuerde que a menudo existen opciones de tratamiento para la infertilidad masculina y que muchas parejas pueden concebir con la ayuda de tecnologías de reproducción asistida.
  • Comuníquese con su pareja si están juntos en este viaje: Mantenga abiertas las líneas de comunicación con su pareja y apóyense mutuamente en estos difíciles momentos. Recuerde que estan juntos en esto y que pueden trabajar en equipo para superar los altibajos emocionales.

Si durante la recolección de esperma no hay espermatozoides o éstos son de baja calidad (y si los resultados anteriores eran buenos o incluso si es la primera vez que realiza un análisis de esperma), puede deberse a varias razones. Puede tratarse de un problema temporal, como el estrés o una enfermedad, o de una afección médica subyacente más grave. Es importante consultar con un profesional sanitario o un especialista en fertilidad para determinar la causa y analizar las posibles opciones de tratamiento.

Recuerde que es normal atravesar distintas emociones y reacciones ante esta noticia. Sea amable consigo mismo y dése tiempo para procesar sus sentimientos. Si tiene dificultades para afrontar la situación, considere la posibilidad de pedir ayuda a un terapeuta o consejero que pueda proporcionarle apoyo y orientación adicionales.